Este estudio examina la conciencia sobre el concepto de desinformación y el contenido problemático en WhatsApp en España. Para responder a la pregunta sobre qué está ocurriendo con la difusión de noticias en este tipo de plataformas, el grupo de investigación Digilab contextualiza el caso ante unos usuarios capaces de trasladar la discusión social y política actual con el uso de aplicaciones de mensajería donde las interacciones entre sus iguales son principalmente privadas.
Este aparentemente infranqueable ecosistema donde convergen amigos, conocidos, y otros no tanto, actúa como telonero de una investigación que aplica una variedad de métodos, entre los que se incluyen grupos focales, encuestas representativas a nivel nacional y estudios diarios con el objetivo de encontrar posibles respuestas y aplicaciones para el futuro.
Las personas tienden a percibir que las noticias falsas tienen un mayor efecto en los demás que en sí mismas
La propia compañía argumentó, en el anuncio de los ganadores de los Premios a la investigación en ciencias sociales y desinformación de WhatsApp, cómo la diseminación de información errónea supone un problema complejo que requiere el abordaje desde los estudios de la psicología humana, la sociedad civil y la tecnología. Además, añaden que si bien no es un problema nuevo, se ve agravado por las plataformas de comunicación impulsadas por la tecnología, independientemente de su nivel de encriptado.
Esta investigación, cuyo impacto y profundización se traslada a países como Brasil, India, Indonesia, Israel, México, Holanda, Nigeria, Singapur, Reino Unido y Estados Unidos, además del caso que nos compete, busca construir un modelo de compromiso con expertos académicos para desarrollar soluciones culturalmente relevantes, a largo plazo y sostenibles para un contratiempo en la sociedad contemporánea con dificultades todavía por determinar.
Con este proyecto se contribuyó en la pre-conferencia Disinformation and political processes: media strategies and audience attitudes (Valencia) y el posterior congreso del IAMCR 2019 celebrado en julio en la Universidad Complutense de Madrid (UCM) bajo el epígrafe Communication, Technology and Human Dignity: Disputed Rights, Contested Truths.
Estas dos comunicaciones que no fueron al uso dieron algunas pistas de lo que, por un lado, representaban los problemas de emisión y recepción de contenido con cierta propensión a lo imparcial, o directamente falso: Facing problematic content on semi-closed platforms. User’s approach to the use of Whatsapp for news consumption.
Por otro, con la ponencia Third person effect and fake news in Spain, y basada en un enfoque secuencial explicativo (grupos focales y encuesta), se confirmaba gracias a los resultados la existencia del efecto tercera persona relacionado con las noticias falsas. Las personas tienden a percibir que las noticias falsas tienen un mayor efecto en los demás que en sí mismas, en función de los prejuicios personales. Como consecuencia, solo unos pocos encuestados verifican que el contenido falso potencial lo obtenga vía WhatsApp, ligado a su facilidad de distribución -a pesar de las posibles buenas intenciones informativas para con tus contactos-. Los resultados también permiten determinar una clasificación de cuatro tipos de usuarios dependiendo de su relación con las noticias falsas.